Nuestro país, en este año 2021, está pasando por un periodo de gran inflación (la mayor inflación desde el verano de 1992).
Como ya sabemos, en una economía de mercado, los precios de los bienes y de los servicios están sujetos a cambios. Algunos aumentan y otros disminuyen. Existe inflación cuando se produce un aumento general de los precios, no solo de artículos individuales, que da como resultado que por cada euro puedan adquirirse hoy menos bienes y servicios que ayer. Es decir, la inflación reduce el valor de la moneda con el tiempo.
En el cálculo del aumento medio de los precios, algunos artículos en los que se gasta más —como la electricidad— tienen un peso mayor que otros en los que se gasta menos.
La volatilidad es la tendencia estadística de un mercado a subir o bajar los precios bruscamente dentro de un cierto período de tiempo. Se mide por desviaciones estándar, es decir, cuánto se desvía un precio de lo esperado, que generalmente es su media.
La inflación es un factor que influye en la volatilidad de los precios: las tasas de inflación afectan el valor de la moneda de un país. Una tasa de inflación baja generalmente exhibe un valor de la moneda en aumento, ya que su poder adquisitivo aumenta en relación con otras monedas.
Por el contrario, aquellos con una inflación más alta generalmente ven una depreciación en sus monedas en comparación con la de sus socios comerciales, y también suele ir acompañada de tasas de interés más altas.
La inflación en la zona del euro: El Índice Armonizado de Precios de Consumo, conocido como IAPC, mide la inflación de los precios de consumo en la zona del euro. «Armonizado» significa que todos los países de la Unión Europea aplican la misma metodología, lo que asegura la comparabilidad de los datos entre países. Esta medida permite realizar un seguimiento adecuado de la evolución de los precios en la economía.
La inflación está creciendo a un ritmo del 5,5% interanual, una tasa no vista desde octubre de 1992. Todo hacía indicar que el auge de los precios había tocado techo, al menos desde El Banco Central Europeo se ha asegurado en los últimos días que el IPC no revisará mayores subidas tras alcanzar el 4,9% de forma agregada en el bloque monetaria. Sin embargo, en España los precios aún podrían tener algo de recorrido al alza, según los expertos de Funcas.
La Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) ha vuelto a revisar al alza su previsión de IPC para España: la última actualización revela que la inflación interanual se situará en diciembre en el 5,8%, seis décimas más que su estimación anterior, debido a que la tasa de noviembre (5,5%) ha sido mayor que la esperada. Noticia aquí
La subida de la luz está impulsada por varios factores, pero principalmente los mercados internacionales son quienes han propiciado este incremento constante durante el verano.
El caso de España no es el único, ya que esta subida del precio de la electricidad también afecta a otros países de la Unión Europea.
La factura de la luz marcó un nuevo máximo en el mes de junio, con 62,94 euros, un 3,6% más que el mes anterior, cuando el recibo ya fue el más caro del año, y ya es un 37,7% superior al de junio de 202, todavía con España bajo el primer estado de alarma por la pandemia, y un 21,8% más alto que el del mismo mes de 2019.
El recibo de la luz sigue su senda alcista presionado por los precios en el mercado mayorista, que siguen al alza por los elevados precios del gas (utilizado para producir electricidad en los ciclos combinados) y de los derechos de emisiones de dióxido de carbono (CO2).
Además, el mes de junio ha sido el primero en el que se ha aplicado el nuevo sistema tarifario que establece tres tramos de discriminación horaria y la posibilidad de tener dos potencias diarias distintas , unos cambios que hacen difícil una comparación exacta entre la factura de junio y las de los meses y años anteriores.
Aun así, según datos obtenidos del simulador de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), para un consumidor tipo —con una potencia contratada de 4,4 kilovatios, un consumo mensual de 250 kilovatios hora (KWh) al mes (distribuido en 70 KWh en horario punta, 60 KWh en horario llano y 120 KWh en e), acogido a la tarifa regulada o PVPC—, e l recibo de junio es de 65,30 euros.
A pesar de esta gran subida, el Gobierno español ha rebajado los impuestos a la electricidad para tratar de amortiguar el impacto de la subida en la factura. Rebajaron el IVA del 21% al 10% y suspendieron el impuesto de generación del 7% durante tres meses para luego confirmar que alargarán la suspensión hasta finales de 2021. Aunque esta medida no ha servido de mucho para reducir el gasto de las familias españolas.
Aun así, evitan adoptar medidas que limiten el coste al ser contrarias al derecho comunitario de la Unión Europea, como detalló la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en el Congreso de los Diputados.
María Fernández- Palacios Hoyuela
Nuestro país, en este año 2021, está pasando por un periodo de gran inflación (la mayor inflación desde el verano de 1992).
María Fernández- Palacios Hoyuela
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